Luciano Lozano
Arcos de la Frontera
Ni el PSOE ni el PP merecen ganar las próximas elecciones andaluzas por mayoría absoluta. Ni queremos ver el mapa de España vestido de azul, el “casi absolutismo” popular, ni conviene la continuidad de los “socialistas” solos en el poder. La alternativa al PSOE, no es el PP, sería estrellarnos en un muro infranqueable.
No podemos seguir aguantando en Andalucía a los mismos de siempre, anquilosados en sus diferentes cargos para pasar toda su vida “chupando del bote”, pero tampoco es saludable dar el poder a la genuina derecha que va a terminar con los derechos laborales y sociales ganados. La única solución es acabar con el bipartidismo, con las mayorías absolutas, ni la de los socialistas, ni la de los populares, y menos la del señorito Arenas. Las privatizaciones, los recortes sociales, educativos y sanitarios, que hoy aplican los presidentes autonómicos del Partido Popular en sus comunidades son los que hará Arenas en Andalucía, si obtiene el poder por mayoría absoluta.
Entre los partidos que darían oxígeno a la política andaluza, la mejor posición la ocupa IU, aunque debería de trabajar por su unidad y claridad en sus actuaciones. Otro partido que daría aire fresco a la política andaluza sería EQUO, partido de carácter ecologista, que presenta otra alternativa al modelo capitalista seguido por el PSOE y el PP. Además, tenemos a otros partidos que nunca han tenido una ideología firme y diáfana, y que lo mismo se alían con el PP que con el PSOE, como el PA o UPyD, lo que es un peligro. Hay más opciones, de todo tipo, anticapitalistas, animalistas, falangistas…Y para los que desconfían con razón de todos los políticos, la abstención, el voto en blanco o el nulo
El PP nos quiere vender que el objetivo de la reforma es crear empleo, aunque después nos avisa sobre el futuro aumento de desempleados. Hace que el despido sea más barato e incrementará el paro. Parece que la única salida de la crisis pasa por minusvalorar a los trabajadores y trabajadores y recortar el bienestar conseguido, aunque consumista y desigual. Los empresarios, los grandes beneficiarios de esta reforma, podrán cambiar unilateralmente el horario, las funciones e incluso el sueldo. Si no estás conforme con las nuevas condiciones, el despido es procedente: 20 días por año de indemnización. El despido casi libre y la devaluación de los convenios colectivos son los dos fines principales de esta reforma “agresiva”.
Llevamos años luchando por nuestros derechos, no debemos consentir su progresiva destrucción, por lo que es absolutamente necesaria una verdadera alternativa de izquierdas en Andalucía que se oponga con rotundidad al poder popular, que intentará disminuir aún más la justicia social y ambiental desde Madrid.
La subordinación penosa al Mercado, a lo que nos piden desde Europa, es una lacra que hace a los políticos súbditos del mundo financiero. Hay que romper este binomio maldito y apostar por el binomio política-ciudadanía.
Como he dicho en otras ocasiones, en este artículo expreso solo mi opinión, respeto la suya, pero Arenas no favorecerá a la clase media, a la juventud y a los más desprotegidos, será un fiel servidor de la CEOE, de las multinacionales y del poder financiero que ha provocado la crisis económica mundial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario