La patrona de Arcos, sí, la Virgen de las Nieves derritió las calles, saliendo en uno de los días más calurosos que se recuerden de los últimos años.
Al llegar a la Corredera, con tanta gente respirando a la vez, la temperatura subió de forma muy palpable. El gentío que se arremolinaba alrededor de su patrona, abría abanicos de todos los colores y tamaños, pero a pesar de ello la temperatura era intensa... ¿intensa? No lo suficiente para la fe de los costaleros, que dentro del paso soportaron una sensación térmica de más de 40º C. Ninguno desvaneció.
Con razón la imagen de la Virgen apareció dentro de un pozito de aguas frescas, milagrosas... y allí fundaron el primitivo convento, siendo que todos los enfermos y ancianos de Arcos iban allí a por el agua, esperando la sanación. Hay numerosos testimonios que aquellos milagros que quedaron recogidos en documentos de la época y aun hoy se conservan sus ruinas en la calle Mudo, junto al Arroyo de las Nieves, a la espera, a buen seguro, de que algún día la imagen sea acercada hasta sus orígenes.
Virgen santa de las Nieves,
nuestra patrona serás...
y en Arcos de la Frontera
tu por siempre reinarás.
Serás tu nuestra bandera,
serás tu nuestro blasón
tu serás virgen bendita
de este pueblo el corazón.
Virgen santa de las Nieves,
nuestra patrona serás...
y en Arcos de la Frontera
tu por siempre reinarás.
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