UNA CAPILLA EN LO MÁS ALTO DE LOS CERROS DEL PARAISO

El anterior parróco de Puerto Serrano nos envía este artículo desde el otro lado del océano

José Luis Calvo Vicente
Lima - Perú

 Pues sí, ya se construyo la capilla en lo más alto de los cerros del Paraiso, concretamente en el  Asentamiento Humano Palmeras del Paraiso para el servicio de todos los vecinos de estos cerros que le han dado a sus asentamientos los nombres tan curiosos de  Mirador eterno, Brisas del Paraiso, Buenavista del Paraiso, Nadine Heredia ( esposa del presidente de Perú Ollanta Humala), Lugano del Paraiso, Balcón del Paraiso, 30 de Octubre, las Nieves del Paraiso y Palmeras del Paraiso. Son aproximadamente unas 1.500 viviendas formadas por parejas muy jóvenes con niños muy pequeños (bastantes ya con tres o cuatro niños y alguna con más) `por lo que las expectativas, teniendo en cuenta de que siguen llegando gente a los cerros más alejados, es que esta zona llegue a 10.000 habitantes en pocos años. Hace tres años que estos cerros que están entre el asentamiento antiguo del Paraiso y el centro de Villa María del Triunfo se empezaron a llenar de casitas sencillas de madera de parejas muy jóvenes solos o con niños pequeños. Unos acababan de llegar directamente de la selva o de la Sierra, otros venían de una casa alquilada que no podían seguir pagando o de casa de sus padres buscando un nuevo hogar para sus hijos. El sistema usado para tomar posesión de un terreno es la invasión. Un grupo de personas elige un cerro lo hacen en lotes donde construyen una sencilla edificación de madera con materiales que encuentran (plásticos, maderas, triples, palos) y algo que pueden comprar (calaminas tripleis y los menos una casa prefabricada de madera). En los cerros no se hace ninguna edificación de material noble (cemento, piedras) salvo algún muro de contención por lo menos en los primeros años, luego ya algunos van empezando a levantar ellos mismos alguna pared de piedra o ladrillos. Luego constituyen una asociación vecinal y parcelan el resto del terreno que se han asignado y eso ya lo venden a otras personas que se acercan después. Aunque la mayoría de las familias que llegan aquí vienen porque no tienen otra posibilidad donde vivir (aquí no llegan autobuses, ni hay colegio, ni posta médica, ni agua, ni luz, aunque la luz la enganchan con un cable desde abajo en una vivienda a la que le pagan sus gastos; y además hace mucha humedad durante al menos seis meses) también están los aprovechados que tienen casa en otro sitio y toman lotes en varios asentamientos para luego venderlos.

La capilla que hemos construido, como pueden ver en las fotos, no se diferencia en nada de las casas  del 80% de la gente de los cerros: sencillas edificaciones de madera (triple, parantes, listones) y el techo de calamina cuatro metros de ancha y ocho de larga. Ni siquiera hemos echado cemento en el piso. Sólo se diferencia del resto de  las viviendas en una sencilla cruz de madera clavada en un lateral, como también pueden ver en las fotos. Nos queda concretar que nombre le vamos a dar y tener una sencilla bendición en una eucaristía el próximo domingo 5 de Mayo. Más adelante se irá mejorando poco a poco pero eso será ya cuando salga de los mismos vecinos que empiecen a sentirla como su capilla pues hasta ahora son muy pocos los que se han implicado.

Ahora toca lo más difícil, construir una comunidad cristiana de gentes que, a diferencia de los asentamientos más antiguos de la zona venían muchas familias juntas con sus tradiciones de la sierra, a estas gentes no les une raíces comunes, muchos de ellos no conocían a nadie de aquí cuando llegaron, y por eso antes de crear una comunidad cristiana hay que crear una comunidad humana. Pero si hay algo que los caracteriza a todos es que, salvo unos cuantos traficantes de terrenos, la gran mayoría son gente muy pobre, muy humilde, muchas madres solas cabezas de familia y con mucho futuro por delante donde el trabajo no va a faltar en todos los niveles: sacramentos (la gran mayoría de los niños están sin bautizar y los padres a lo sumo tienen el bautizo pero sin primera comunión y menos aún el matrimonio religioso) educación, sanidad, vivienda digna etc.

Próximamente les comunicaré el nombre que le vamos a dar a esta capilla que la parroquia San José de Nazaret ha visto necesario construir en estos cerros porque como dice nuestro Papa Francisco:” la iglesia está llamada a salir de sí misma e ir hacia las periferias, no solo geográficas, sino también existenciales. Las del misterio del pecado, las del dolor, las de la injusticia, las de la ignorancia, las del pensamiento, las de la miseria. Cuando la iglesia no sale de sí misma para evangelizar deviene autorreferencial y entonces se enferma”.