Se prohíbe el amor

José María Pérez Gómez

Cuentos del Alma

“- La energía es antes que la materia.” 

 Así lo afirmaba Tesla…

   Según esta teoría, se puede sacar materia a partir de energía. Por esto y por otras cosas, este científico nos parece el más brillante, ni Edison, ni Einstein y tantos otros llegaron tan lejos. Así pues, el misterio de la creación, el famoso Big Bang se produjo por una explosión de energía que generó la materia. Tesla investigaba un universo eléctrico en el que todo estaba y todavía está conectado, le fascinaba investigar la energía, porque para un creyente como él, esto no le generaba controversia ninguna, lejos del escepticismo, sus investigaciones le conducían aún más si cabe a Dios.

   Haciendo ecuaciones, deducimos que nosotros somos materia del universo, mantenidos por una corriente eléctrica que nos mantiene vivos y alimentados por la materia que comemos y bebemos… Todo sale del mismo sitio, de la misma energía que se expande y crea la materia.

   Ahora que se cumplen nueve años que mi corazón dejó de latir durante algunos minutos, recuerdo que durante ese tiempo que a mí me pareció una eternidad, después de un gran mareo, perdí el tacto, la movilidad, me quedé sordo y ciego…, muerto, pero aun así, sentí el despegar de mi cuerpo, noté esa energía que tenemos dentro: Flotaba en aquella habitación y me veía atraído por las energías que notaba en otros cuerpos vivos. 

   Lo he dicho muchas veces, mi energía al principio estaba muy angustiada por abandonar aquel cuerpo, no quería irse… No quiero aburriros con cosas que ya os he contado en otros artículos, sabéis que me di una vueltecita corta de reconocimiento, que estuve junto a personas que amaba y sentía sus angustias sobre mí. 

   Cuando me resucitaron los médicos, esa energía cayó sobre mi cuerpo y lo primero que noté es como si hubiese entrado por el corazón, el motor empezó a funcionar, podía sentir hasta los latidos y notaba como la sangre volvía a fluir y a regar mi cuerpo, primero por el brazo derecho, luego el resto y noté un gran alivio.

   Es muy difícil explicar lo que se es, o lo que se siente sin cuerpo, pero aquí estoy. Me habéis preguntado muchas cosas… Sólo estuve unos minutos, no sé realmente cuantos, me daba miedo preguntarlo y desde entonces mi vida cambió, porque desde entonces busco una explicación. Mucha gente es creyente y practica una religión sin saber por qué… y yo que a todo le busco una explicación y que me tienen que convencer, no sé ahora quién o quienes pueden llevar la razón o si nadie la tiene y por respeto muchas veces callo y no digo lo que pienso. Sin embargo sé que soy de los pocos que han experimentado la existencia del espíritu, esa energía que nos mueve por dentro. No vi a Dios, si es lo que os estáis preguntando, tampoco el famoso túnel, pero cuando notas tu propio espíritu, notas su energía, podéis llamarme loco si queréis…, antes cuando estaba “cuerdo” no notaba esta energía. 

   Ahora creo que el cuerpo nos corroe y engaña porque es efímero, porque sin nuestra chispa no puede alimentar su materia y ego. Sin embargo, en nuestro viaje, no necesitamos nada, porque sin saberlo somos la energía de la que sale la materia.

   Cuando surge el amor y saltan chispas, se produce un derroche de energía que no controlamos y de ahí puede surgir un nuevo ser. Imaginarse que algún ministro de energía se fijase en estas chispas y tratase de cobrar por su producción… 

¿Se puede cobrar por ello? 

  Tesla creía que esta energía era gratuita y debía revertir en el beneficio de la humanidad. Materializar la energía del Sol que nos da la vida es mezquino y diabólico, si compro una placa fotovoltaica y pago los correspondientes impuestos por ella, no se me puede cobrar por la energía que genere. Esto sería cómo si te cobrasen por hacer el amor, por el amor no se puede cobrar, lo demás es un putiferio.