Miles de aves buscan refugio para pasar la noche aquí, cuando cae la tarde, en invierno.
El entorno de la Peña arcense debería de ser protegido y tener vigilancia para que las pernoctaciones de nuestras aves sean seguras. No se pueden permitir tiros, disparos que a veces se oyen y otras perturbaciones, ni siquiera en los alrededores... o ¿es que estamos locos y no tenemos valores?
A pesar de estar convertida en un muladar, llena de escombros, de porquería y otras irregularidades, hemos podido sacar su lado positivo, el bueno y grabar unas imágenes impactantes. La Peña es Monumento Natural de Andalucía, aun así creemos que debería ser también protegida su riqueza biológica, este entorno se merece que sea reconocido como RESERVA DE LA BIOSFERA. Hasta no hace mucho vivía en este hábitat el calamón, sí ese gallo de color azul, considerado el rálido más raro de Europa, se ha desplazado sin que sepamos por qué. Aún quedan algunas garcillas cangrejeras, la más pequeña del continente y nos visitan muchas aves en sus viajes migratorios, otras deciden quedarse a pasar el invierno como los cormoranes que vienen desde Noruega, Escocia, Finlandia... pero otras deciden criar a su prole, como el popular cernícalo primilla que tiene aquí su colonia más importante de toda Andalucía, también son nidificantes el pito real, la paloma bravía y la torcaz, los estorninos, jilgueros y cómo no, los depredadores potentes como las águilas calzadas o el búho real, a cuenta de ello los ánades reales y ánsares asilvestrados toman precauciones. En la parte pegada al Barrio de El Competa, el homo sapiens cría gallos de la raza combatiente español, hoy reconocidos los arcenses, como los mejores del mundo. Pollos de aquí han alcanzado en la reventa precios desorbitados para los que no estamos acostumbrados a este tipo de mercado.
Pero lo que más llama la atención de esta Peña, además de su bello paisaje, es su microclima tropical, siendo en sí un paraíso para los reptiles más grandes de Europa. Aquí la culebra bastarda alcanza las proporciones más impresionantes, de libro Guinness, se han llegado a retratar ejemplares de tres metros y por otro lado también existe un reducto de camaleones.
En cuanto a los mamíferos carnívoros, destacaremos las incursiones del meloncillo y de la nocturna jineta, sin descartar al gato doméstico en estado asilvestrado, en una zona dónde además de lo expuesto anteriormente, abunda el conejo y la rata.