sábado, 23 de julio de 2011

A UNA MUJER NO LE PREGUNTAMOS DE QUE COLOR TIENE LA SANGRE: SI AZUL, ROJA, AMARILLA O VERDE

Uno de los "Padres" adoptivos en la Piscina Municipal
de Villamartín

Los "Gañanes" no tienen pedigrí pero son igualmente cariñosos
y sobre todo igual de perros
 José María Pérez Gómez
Sierra de Cádiz

        ¿Crees que no eres racista? Empecemos por una cosa simple... ¿Tienes Perro? ¿De que raza? ¿Dónde duerme?¿Le tienes siempre limpio el cacharro dónde come? Pregunto esto porque me he visto envuelto hace poco en un dilema, mi perro es un "Bodeguero" que me regalaron hace dos años y pico en Benamahoma, en principio no iba a quedármelo, se lo iba a colocar a un amigo, pero éste ya tenía perra y como por teléfono no lo veía pues decidió que ya tenía el cupo... así que lo miré y me cautivaron sus brillantes ojos y le dije:

                 - Vale te vienes conmigo.

         He tenido más perros, no siempre de raza, mi primera perra fue una Podenca, después los que le siguieron fueron "garabitos," cruzones y hasta hoy. No porque sea de una raza u de otra, más bonitos o más feos he querido a un perro más que a otro, pero el caso es que mi perro, “Benito” ha tenido cachorros hace poco. El dueño de la perra, un amigo, no estaba nada contento, su perra, una Pastora Alemana con Belga no era lo más recomendable para un Bodeguero..., o mejor dicho al contrario...

                - “Benito” espero que la próxima vez utilices un condón...

       ¡Siete cachorros...! Y los siete iba a llevarlos mi amigo a la perrera, no les había buscado una solución porque para él no son legítimos y no deben de existir..., pues los vi y sabiendo que a los diez días si no los adopta nadie la solución es una inyección..., decidí colocarlos como pudiera. Tenía un problema, mi amigo se había desentendido totalmente, porque según él soy yo el dueño de los perros, ya que fue mi “Benito” que no utilizó el condón entregado en su fragante amor perruno. Así me vi con siete perros en mi coche y con muy poco tiempo pues esa misma tarde tenía que ir a trabajar, decidí darme una vueltecita con los cachorritos y el primer lugar que pisé fue la piscina municipal de Villamartín, donde coloqué al primero y eso me dio animos para seguir colocando al resto, en Puerto Serrano coloqué a cuatro en menos de una hora, me quedabán dos y me los tuve que llevar al trabajo. Pensé en aquellas personas que los habían adoptado y me di cuenta que eran especiales, pues aun sabiendo que los perros eran cruzados se los quedaron, mientras les bromeaba y les decía que eran de la prestigiosa raza “Gañanes”, dado que el padre es un “Bodeguero,” por medio vinieron muchos curiosos a golimbrear pues los perros como podéis comprobar son preciosos, pero al no ser de raza los rechazaron,  y pensé:

         - ¡Vaya...! Ni que fueran moros, judíos, negros... ya los han clasificado.

         Aunque también es verdad había personas que les dio pena no tener sitio para quedarselos. Así me volví hacia los dos que me quedaban y vi que me quedaba justo una parejita y que no debía de separarlos por lo que a pesar de haberlos podido colocar antes, decidí que iban en el mismo lote, total los estaba regalando. Las ilusiones que repartía me hicieron sentir como un rey mago, pero estos dos últimos no había manera de colocarlos, los tuve tres días conmigo y se lo dije a mi amigo, le pedí que lo intentara pues yo tenía que trabajar, le conté lo sucedido y se alegró al final, pero después de recogérmelos no he vuelto a saber nada más de éstos perritos, me remuerde la consciencia, pues creo que han podido ir a la perrera.
 
          Extrapolando esto a las personas me pregunto, que pasaría si antes de salir con una mujer le preguntara si tiene la sangre azul, roja, amarilla o verde, a mi me da igual..., si me gusta no pregunto y si no, menos, por eso veo que muchos que aseguran no ser razistas no tienen nada que decirme, para saberlo: nada más tengo que ver su perro, su coche, su casa, su mujer... y su jaca.

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