Manuel Barrios Pérez, junto a su mujer, Dolores Rodríguez Duarte |
Arcos de la Frontera
Doña Dolores Rodríguez Duarte es la campanera de la Basílica de Santa María de la Asunción de Arcos de la Frontera y desde octubre de 2014 manifiesta ser perseguida para que deje su casa. Vive en la mismísima torre desde hace más de cuarenta años, desde el 13 de enero de 1966 y la familia de su marido lleva viviendo en el mismo lugar desde antes que se construyese esta torre, ya que la anterior se cayó con el terremoto de Lisboa en 1755.
Ahora, tras la muerte de su marido, el 29 de septiembre de 2012 una amenaza le acecha: Afirma que tras este hecho un señor que ha usurpado el puesto de su marido le da órdenes y que desde el obispado le han dado un ultimátum para que se vaya de su casa, que desde octubre han dejado de pagarle y que tienen prisas… Nunca cotizaron a la seguridad social por ningún miembro de su familia y cree tener al menos unos derechos consolidados, que si se tiene que ir habrá que indemnizarla.
La familia de su marido tiene una gran historia en este campanario, incluso se jugaron la vida cuando tocaron las campanas avisando de la llegada de los ejércitos napoleónicos a Arcos. Hoy con ella acaba una dinastía pues ninguno de sus hijos, dos mujeres y un varón, pueden hacerse cargo de la torre, ya que el varón tiene un 95% de minusvalía.
Dolores tiene una depresión y está pidiendo ayuda a todos los que podamos prestársela, afirma que quiere morirse en la torre como todos los miembros de su familia y que si la echan de su casa acabará arrojándose por la peña. Pide el apoyo de todos los feligreses y que esto si tiene que llegar, que llegue hasta el Papa.
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