En el BAR PRIMERA algunos sábados huele que alimenta y es que el chef Manolo Rondán puede estar en el salón de atrás haciendo un plato como para unas 80 personas... Él lleva muchos años haciéndolo, tantos que no se acuerda cuando empezó.
Manolo: "- Esta paella es de pollo, la elaboración es muy laboriosa pero una vez puestos manos a la obra, tardaremos como hora y media o dos horas en que el plato esté listo. Aquí viene mucha gente y lo hacemos de vez en cuando. Hacemos varios tipos de paella, pero también hacemos comidas típicas de Arcos: El ajo molinero, abajao, los esparraguitos, el pollo de campo, las cabrillas, los caracoles... Yo soy uno mas, me gusta la cocina y como soy de la familia, aquí vengo a echar una mano, porque ellos tienen mucho jaleo en la cocina..., yo vengo y le hago el arroz.
Me gusta mucho la cocina tradicional de Arcos, el tema del potaje, el potaje de berza, de pollo... y también los hago para comuniones, bautizos, reuniones de amigos, algunos bares que me llaman y hasta en El Rocío, el Día del Caballo, la Romería, Feria..."
Y es que las recetas de las abuelas pasan de mano en mano, de boca en boca, como pócimas mágicas, convirtiéndose en la cultura de un pueblo. Como buen cocinero, a fuego lento Manolo cocina las recetas de nuestra sapiencia, el arte culinario está reservado para aquellos que con paciencia saben esperar y mientras lo hace, en la barra muchos aguardan para poder saborearlas tomando una cervecita o un vinito.
Por la calle El Molino un fogón calienta una sarteneja, la carne se emblandece y los jugos se desparraman poco a poco, lentamente el olor sube y se mastica, se saborea en el aire, se percibe que Manolo está cocinando un pollo con arroz...
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