Gracias a la burocracia peruana, el padre José Luis Calvo Vicente hace turismo en Colombia

Padre José Luis Calvo Vicente

José Luis Calvo Vicente
Bogotá - Colombia

       ¡Hola a todos!

 

       Hoy he visitado la catedral de la sal considerada la primera maravilla de Colombia. Se trata de una antigua mina de sal inmensa, una montaña verde por fuera llena de arboles pero que por dentro está toda ella llena de tuneles. Parecido a la gruta de las Maravillas en Aracena pero en vez estalagmitas, sal. Después hemos estado comiendo una comida típica del campo peruano, de la zona de la sabana, se llamaba piqueo y era una montaña no de sal sino de chorizo, morcilla, ternera, gallina criolla, platano, patata y alguna otra cosa más que no recuerdo, todo ello asado a la brasa allí delante de nosotros en un inmenso fuego con una gran parrilla. He disfrutado comiendo, me ha encantado. Ahora me queda probar una cosa que he visto que se llama fritanga y es parecido pero frito.

 

       Para finalizar la tarde hemos estado a ver a la madre de la hermana Cristina, agustina misionera, una de las tres que están en la parroquia en el paraíso y hemos disfrutado viendo las cosas que hace con sus 80 años ( bolsos, manteles, fruteros flores etc). Mañana iremos a una laguna a la que hay que subir andando unos cuantos kilómetros y por tanto seguro que será también un dia para disfrutar. Gracias a la burocracia peruana. Dios escribe recto con renglones torcidos. Hasta mañana. Me he olvidado en Lima el cargador de la batería y ya se me ha terminado. Espero que mañana lleve su cámara alguna de las hermanas que me acompañan.

       Este ha sido el último correo que hemos recibido de este padre misionero, que ejerció con anterioridad en la Parroquia de Santa María Magdalena de Puerto Serrano. Recordar que José Luis ha tenido que salir del Perú donde ejerce como misionero, tras haber perdido burocráticamente el permiso de residencia del que disfrutaba.