Microrelatos para leer con los ojos cerrados

El Centro Día se convirtió en el escenario de esta presentación

PÍA - Arcos de la Frontera

                Este viernes, Antonio Martínez Polo presentó su libro: “Microrelatos para leer con los ojos cerrados”.  El acto estuvo presentado por Pedro Sevilla y José Antonio Benítez, participando en la mesa el alcalde José Luis Núñez y el presidente de la  Asociación de Jubilados Miguel Mancheño:  Laureano Barrera.

 

LAUREANO BARRERA: “ – Señor alcalde, miembros de la corporación municipal, señora directora y presidente del Centro de Día, queridos compañeros de junta directiva…

 Todos los días no tenemos un acto como este, hoy es un orgullo para nuestra asociación presentar un libro por primera vez, que no solamente es un nuevo libro, sino que está escrito por un socio secretario de la asociación. Gracias Antonio por incrementar los actos culturales de otoño y que Dios te siga iluminando para que con tus escritos, artículos, etc., nos sigas deleitando.

Nuestro autor nace en el año 1951 en Nueva Cartella (Córdoba), estudia magisterio superior y bachillerato en Madrid, ciudad en la que ejerce durante tres años antes de ser trasladado a nuestro Arcos de la frontera, lugar en el que conoce a su esposa y en el que se instala definitivamente.

                Desde joven siente inclinación por la escritura, pero no es hasta su jubilación anticipada, por problemas de visión, cuando dedica más tiempo a su afición, publicando en la prensa local, en Arcos Información, que lleva publicado 280 artículos…

 En el terreno literario se inclina por los relatos cortos, siendo premiado en el IV Concurso de Hiperbreves Moviestar y quedando finalista en el VI Certamen de Literarura Hiperbreve Pompas de Papel y en el Segundo Concurso de Relatos Cortos Besos de Reché. Tiene publicados dos libros: Microrelatos para Niños Inteligentes y el de hoy, Microrelatos para leer con los ojos Cerrados, esto es nada con lo que se podría decir de Antonio, podríamos rellenar un folio por las dos caras…”

 

PEDRO SEVILLA: “ - Querido alcalde, queridos miembros de la corporación municipal y queridos vecinos, muy buenas tardes…

 La greguería, dicen que inventada por Ramón Gómez de la Serna, es pillar al idioma por sorpresa, cogerle las vueltas a las palabras para que digan más de lo que dicen o lo digan de forma sorprendente y estupefaciente, dislocar el lenguaje, hacer chocar una palabra con otra, descoyuntar los conceptos produce chispas eléctricas que son las que hacen que al fin y al cabo nos hacen reír, sonreír o incluso carcajearnos. El aforismo, la sentencia, la conceja, el refrán e incluso el chiste o el chascarrillo son de la misma familia, si bien los primeros, me refiero al aforismo y la sentencia, se nos presentan formulados con más seriedad. Han sido practicados por filósofos, poetas y escritores de la talla de Niche, Juan Ramón Jiménez, Monterroso y otros…

Todos estos pequeños grandes apartados literarios, me refiero a la greguería, al aforismo y a los demás que he indicado… ¿Pueden ser considerados cómo microrelatos? Pues yo creo que sí, porque a poco de diseccionemos la palabra tenemos el significado exacto: micro significa pequeño y relato es algo que se cuenta por escrito o bien oralmente.

Cuando Gómez de la Serna nos dice que una lagartija es un cocodrilo de bolsillo, nos está contando que ambos animales son de la misma familia, pero a la lagartija por su tamaño nos la podemos meter en el bolsillo, y más modernamente podemos cocérnosla en un polito Lacoste…

Cuando Niche escribía: El Infierno de Dios es su amor a los hombres…, estaba relatando su tormento interior con palabras duras, poéticas, estremecedoras…

Cuando Paco Gandía contaba el chiste de los garbanzos, o Chiquito de la Calzada se inventa nombradías como “menetericas” o “fistro de la pradera…” no están más que haciendo microrelatos, pequeñas piezas oratorias o escritas, que convenientemente electrizadas y llenas de absurdos, ironías, temblor poético o perplejidad, nos hacen sonreír o mearnos de risa.

Antonio Martínez Polo en estos Microrelatos para leer con los ojos cerrados, que hoy presentamos al alimón mi amigo José Antonio Benítez y yo, reúne a mi modo de ver una especie de compendio de todos los géneros antes enumerados…

… Envuelto en una prosa habilidosa, el autor nos entrega en este libro un antídoto eficaz para estos tiempos de crisis y de malas caras, hacer reír y además hacer pensar, que es lo mejor que un ser humano puede hacer por otro, por eso creo debemos estar muy agradecidos a nuestro escritor, porque a través de la ironía, del sarcasmo, de la contradicción, ha sabido entrar en nuestros corazones y llenarlos de luz…"

 

JOSÉ ANTONIO BENÍTEZ:  " - Muy buenas tardes a todos. Si me lo permiten comenzaré hablándoles esta tarde de Antonio Martínez Polo, un escritor de ojos abiertos.

Al cabo de unos años me pregunto qué hubiera sido de aquel chaval de Nueva Cartella (Córdoba), si no hubiera recibido la beca que le permitió estudiar, cultivarse y haberse convertido en el hombre culto, educado y sumamente cordial que hoy es. Si el caudillo hubiera hecho algo bueno con Antonio Martínez, hubiera sido la inauguración de la Universidad Laboral de Alcalá de Henares, donde quien hoy nos ocupa realizó su carrera de maestro, eso sí, sin le necesidad de concurrir a unas oposiciones, esas que en estos tiempos sencillamente no se convocan porque no hay trabajo.

La movilidad geográfica a que con mayor o menor crueldad obligan determinados trabajos, caso de los maestros, le condujo, pienso que felizmente, hasta Arcos de la Frontera en los primeros años ’70, para ocupar plaza en el que ha sido el colegio de su vida: Vicenta Tarín, donde conoció a Mary Carrera, su esposa y madre de sus cuatro hijas.

Educador que ha superado cuantos cambios le ha impuesto el sistema durante tres décadas, este amigo de la tiza, de la disciplina y sobre todo del respeto, encuentra en el esfuerzo y en el estudio constante de las cosas, el verdadero éxito en la vida, un esfuerzo que tal vez eche de menos en las nuevas generaciones de estudiantes.

Jubilado en 2004 porque el pobre no veía tres en burro…, un día pensó que podía echar un cable en la Asociación de Jubilados y Pensionistas Miguel Mancheño, a cuya sede acude casi a diario para llevar el papeleo y consultar internet, tarea que compagina con la publicación de un artículo semanal en el periódico Arcos Información, primero con una magnifica serie de corte costumbrista bajo el título: “El Tabanco del Candil” y luego como “El Banco de Madera”, donde igualmente Antonio se prodiga en situaciones cotidianas desde un punto de vista irónico y crítico. En cualquier caso dos buenos lugares para sentarse a escuchar las ocurrencias de los personajes y tomar un sorbo del vino de la vida…

… En medio de tanta vulgaridad, de humor fácil, de risa tonta en toda regla, hay trabajos que destacan por su inteligencia, su soltura literaria y su capacidad de transmitir emociones en forma de sensaciones.

Microrelatos para leer con los ojos cerrados, es el reflejo de la vida en sí, de sus situaciones más cotidianas, sean cómodas o no, y también de la obra de los personajes que somos las personas, pero con Antonio las cosas se hacen animadas, toman personalidad y al fin y al cabo se humanizan, los cuerpos inertes hablan por sí solos. En esta reunión de pequeñas historias, breves cuentos de ficción y realidad, la ironía es en ocasiones el hilo conductor.  Una ironía presente inexorablemente en nuestras vidas cuando afrontamos las ambigüedades y las contradicciones por las que actuamos el ser humano desde que nos bajamos de la cama, porque:  ¿Quién pensaría a voz de pronto, que el médico es el fumador al que un paciente machaca pidiéndole que abandone su hábito, o que un antipinocho es un político al que le crece la nariz cuando dice la verdad…?

… Antonio recurre a los sapos y culebras que echamos de vez en cuando en forma de verbo, sin que ello sea una licencia grosera en ningún momento…"

 

ANTONIO MARTÍNEZ POLO: “- Buenas tardes. Para empezar quiero dar las gracias al señor alcalde por prestarse a presentar el libro y a presidir este acto. Quiero también dar las gracias a la Delegación de Asuntos Sociales, a Juani Morales, Isabel y a todo el centro por cedernos este local para presentar este acto, quiero agradecer a Pedro y a José Antonio sus palabras, cariño y puntos de exposición para presentar el libro, quiero dar las gracias a Laureano y a los compañeros de la junta directiva por su entusiasta colaboración, quiero dar la gracias a mi familia, a mi mujer, hijas, nietos y a mis yernos que me ayudan con la informática y por supuesto dar las gracias a todos los aquí reunidos, a todos los que me honráis con vuestra presencia y en especial a los que han venido de fuera.

Aunque los microrelatos se han puesto de moda en los últimos tiempos, no son algo nuevo, en Oriente existen desde hace siglos… y hay quien ve en ellos la prosa de los haikus japoneses. Las mismas palabras Jesús, del Señor, son perfectos microrelatos.

Hunde sus raíces en la tradición oral, en las fábulas, apólogos, adivinanzas, epitafios… En la Edad Media sientan sus bases en los llamados bestiarios y más adelante continúan con las Sentencias del Conde Lucanor, pero no es hasta la época moderna cuando se popularizan en español, alcanzando la madurez en la segunda mitad del siglo XX de las manos de insignes escritores hispanoamericanos como Rubén Darío, Borges, Cortázar, García Márquez, Arreola o Monterroso…, el de los dinosaurios. En España no faltan cultivadores clásicos como Ramón Gómez de la Serna, Duque de Alegría, Juan Ramón Jiménez… Surge así una propuesta literaria como género idóneo para definir, parodiar y poner del revés los nuevos tiempos.

A veces me preguntan: ¿Por qué escribo microrelatos? Y siempre respondo lo mismo, me encantó el género del que entre en contacto con el a través de un concurso, que consistía en enviar los relatos por el móvil como un mensaje de texto, y que pretendía habituar al usuario a escribir correctamente el castellano. Salí premiado y ya desde ahí profundicé en ellos y me animé a seguir escribiendo. Parecen sencillos de escribir, pero su composición minúscula requiere ingenio…

… Juega con la riqueza del idioma, cromatiza el significado de las palabras, por el doble sentido que el lector debe descubrir para comprender el significado y también porque en la relectura, ahora con los ojos cerrados es cuando se encuentra el verdadero sentido. "

 

JOSÉ LUIS NÚÑEZ: “ – Sr. Presidente Laureano, Asociación de Mayores Miguel Mancheño, querido presidente del Centro Día, Pedro Domínguez, queridos compañeros de corporación…, querido José Antonio, Pedro…, muchas gracias, yo creo que me habéis dejado muy poco que decir, buenas noches a todos, para mí un honor estar esta noche aquí, en un acto donde en principio los compromisos de agenda…, pero tratándose de Antonio…

… Cuando dices que… La honradez del político es tan breve como un relato, la verdad es que jode, porque también podría ser la verdad…: el político tan breve como…, yo qué se… la de un periodista o la de un economista… Pero bueno yo creo que eso lo hace él amparándose en la licencia que permite también a los que escriben, pues ampararse en esa licencia de que los políticos lo aguantamos todo… y cómo lo aguantamos todo, acogemos con una sonrisa estos breves relatos…

… Yo creo que de él he aprendido mucho, lo que es el don de la brevedad, de lo que es resumir en muy poco mucho contenido. Creo que en tiempos tan difíciles como los que estamos la verdad es que Antonio y por el breve repaso…, acabo de conocer ahora el libro, al igual que ustedes lo vais a conocer ahora… Entiendo que en estos tiempos hace falta alguien que nos diga:

Hombre que la cosa se está poniendo mal, pero siempre hay un hueco para la sonrisa, para el optimismo…, para pensar que somos capaces entre todos de sacar esto adelante y en definitiva no dejar solamente en manos de los políticos que arreglemos esto ¿eh…? Porque aquí mucho pedir, mucho pedir pero poco dar y donde no hay no podemos dar más de lo que tenemos.

Lo que sí está claro es que tanto nosotros como nuestro equipo de gobierno estamos poniendo toda la carne en el asador para sacar esto adelante, pero que hace falta gente como Antonio que ponga una sonrisa, que ponga un paréntesis a la crisis, a ese gris que nos invade en estos tiempos, que sea capaz que con ese ingenio, con ese humor agudo que tiene, detrás de esa persona seria, que aparentemente es lo que demuestra y al menos lo que yo entendía cuando era mi profesor.

Por eso este libro tiene que recibir el apoyo de todos nosotros."